¿Cómo saber si necesito ir a terapia psicológica? 7 señales claras de que es el momento
- Gema Benito González
- Jun 2
- 2 min read
Updated: Jul 23
1. Sientes un malestar constante que no sabes explicar
Hay épocas en las que no estamos bien, pero no sabríamos decir exactamente por qué. Puede ser una tristeza persistente, una sensación de vacío, irritabilidad, o simplemente un “no me encuentro bien conmigo”.
A veces el cuerpo nos da pistas antes que la mente: fatiga, insomnio, dolores frecuentes, falta de energía. Cuando este malestar se alarga y no mejora con descanso o cambios cotidianos, puede ser una señal clara de que necesitas apoyo emocional.
2. Te desbordan cosas pequeñas o cotidianas
Situaciones que antes gestionabas sin problema ahora te superan. Saltas con tus hijos, te sientes desbordada por tareas simples o reaccionas con una intensidad que no entiendes.
Esto suele pasar cuando tu sistema emocional está saturado. No eres débil: estás agotada, y tu cuerpo y mente te están pidiendo que pares y mires hacia dentro.
3. Estás atrapada en bucles de pensamiento negativos
¿Te das muchas vueltas a las cosas? ¿Te cuesta soltar errores del pasado, tomar decisiones o dejar de preocuparte por lo que puede pasar?
Los pensamientos circulares, la autocrítica constante o el miedo excesivo son signos de que tu mente está atrapada en dinámicas que pueden trabajarse y aliviarse en terapia.
4. Has perdido el interés por cosas que antes disfrutabas
Te cuesta ilusionarte, conectar con lo que antes te motivaba o simplemente disfrutar. Puede parecer que vas en “modo automático”, cumpliendo con tus responsabilidades pero sin energía ni disfrute real.
Cuando perdemos el vínculo con el placer o el deseo, algo importante dentro de nosotras está pidiendo atención.
5. Tus relaciones se están viendo afectadas
Puede que discutas más, te aísles, no sepas cómo poner límites o sientas que no puedes pedir lo que necesitas.
La terapia puede ayudarte a mirar cómo te relacionas, recuperar tu voz, y construir vínculos más sanos y auténticos con los demás… y contigo.
6. Estás atravesando un momento vital difícil
Una pérdida, una separación, un cambio importante, una maternidad reciente… A veces la vida nos coloca en situaciones que nos remueven profundamente.
Estos momentos no tienen por qué vivirse en soledad. Un acompañamiento terapéutico puede darte espacio, claridad y sostén emocional.
7. Quieres conocerte mejor o cambiar patrones
No hace falta estar mal para empezar terapia. A veces simplemente sentimos que queremos conocernos mejor, salir de ciertos automatismos o vivir con más libertad, coherencia y calma.
La terapia también puede ser una forma de crecimiento, de reconexión y de cuidado profundo hacia ti misma.
¿Y ahora qué?
Si te has sentido identificada con alguna de estas señales, quizá sea el momento de escucharte con más profundidad. Pedir ayuda no es rendirse: es una forma de decirte a ti misma que mereces estar bien, y que no tienes que hacerlo sola.
Mi nombre es Gema Benito González, soy Psicologa en Barajas, y ¡estoy aquí para acompañarte!
Comments